domingo, 7 de noviembre de 2010

LA BATALLA QUE GANÓ RENAULT


LA VALIJA quiere dejar constancia que buscó en la red, por horas el modelo de auto que se menciona en la nota, sin ningún éxito. Por ello, y para que Uds. tengan una leve idea de como era, colocará una imagen de un FORD T de un año cercano. Además no era tan adelantado.

LA FLOTA DE TAXIS DEL MARNE

A finales de agosto de 1914, en los albores de la 1º Guerra Mundial- conocida como "La Gran Guerra" y de la cual se creía era iba a ser la única - el Ejército alemán preparaba un ataque inminente sobre París, a través del conocido Plan Schlieffen- que consistía en una "carrera fulminante" hasta esa ciudad, que no tuvo éxito en ese momento pero sí en la 2º Guerra al ser usada por Hitler- y cuyo objetivo final era invadir toda Francia desde su flanco occidental - por el Río Marne - en una operación que movilizaría a cerca de millón y medio de soldades, manteniendo otro medio millón en el Este, para frenar un posible ataque de los rusos.

El espionaje francés pudo detectar diferentes transmisiones de radio - no codificadas - desde la antena colocada en la Torre Eiffel y alertar a los superiores de las intenciones alemanas.

Era necesario trasladar con toda urgencia a las tropas francesas, ubicadas mayoritariamente en París - un batallón de 6.000 soldades- hasta el Río Marne. Pero se carecía de vehículos militares para un desplazamiento rápido y fue entonces cuando el General Joseph Galliéni - el más veterano de los jefes franceses- tomó una decisión tan inusual como maquiavélica y que cambiaría el transcurso de la batalla y porque no de la Guerra.

Galliéni "ordenó" que "todos los taxis de París", unos seiscientos, se concentraran la noche del 7 de septiembre en la Plaza de los Inválidos - pleno centro de la ciudad-, ya que desde allí trasladarían armamentos, víveres y tropas hasta el frente de batalla situado a unos 37 km.

La mayoría de los vehículos, modelos 8CV de Reanult, realizarían dos viajes de ida y vuelta con las luces apagadas- para no ser vistos por el enemigo - y sin agua para consumo humano- por la escasez que había en esas fechas en París- limitación que fue contrarrestada con abundante vino para los conductores que, milagrosamente bajo esta circunstancia, desempeñaron su trabajo sin incidentes. Es de hacer notar que el combustible necesario para esos viajes fue solventado por los mismos propietarios de los autos, no por el Gobierno francés.

Ganada esa 1º batalla del Marne y finalizada la Gran Guerra, no es de extrañar que LOUIS REANULT, precursor de estos automóviles, junto con los valientes taxista, fueran considerados "Héroes Nacionales" y que los vehículos se bautizaran con el nombre de REANUT TAXI MARNE.

Este episodio, ha sido muy bien narrado por el escritor KEN FOLLET, en su último libro-éxito "La caída de los gigantes"

No hay comentarios:

Publicar un comentario